lunes, 21 de noviembre de 2016

La Virgen del Carmen y el Cristo Marinero regresaron a su capilla tras el Besamanos Magno

Después de un sábado intenso en la Parroquia de Santa Catalina, la cual acogió el Besamanos Magno con motivo de la Clausura del Año Jubilar de la Misericordia, las hermandades del Carmen y el Lignum Crucis regresaron en la jornada de ayer a su sede, la Capilla del Espíritu Santo.

Pasaban las doce del mediodía, una vez finalizada la Eucaristía de las once de la mañana, dedicada a la Festividad de Cristo Rey, cuando la cruz parroquial se ponía en la calle en busca del barrio de la mar, y precediendo a los titulares de ambas corporaciones. 

Un cortejo de contrastes, el silencio que se contuvo a la salida del Cristo del Perdón dio paso posteriormente a los aplausos al asomarse la Reina del Carmelo por la puerta de la parroquia. Un traslado que se realizó por el
camino más corto y de manera algo apresurada, debido a la inestabilidad del tiempo, que afortunadamente respetó el regreso a la capilla de ambas imágenes.

Les dejamos a continuación con una galería fotográfica del traslado: