domingo, 12 de marzo de 2017

Los titulares del Nazareno regresaron a su capilla tras presidir el Vía-Crucis de las Hermandades

La tarde primaveral del día de ayer dejaba paso a una noche en la que la luna llena sería fiel testigo del regreso de los titulares de la Hermandad del Nazareno a la Capilla del Jesús, tras la estancia en el primer templo conileño, motivada por las labores de limpieza y adecentamiento que se han llevado a cabo desde el pasado mes de septiembre.

Pasadas las ocho y media de la tarde, la cruz de guía de la cofradía del Jueves Santo se disponía en la puerta de Santa Catalina, para iniciar el Vía-Crucis de las Hermandades y Cofradías, que sirvió esta vez para realizar el traslado de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Señora de los Dolores a su sede.

La imagen del Nazareno fue portada en una parihuela por una cuadrilla de
antiguos cargadores, conformada para la ocasión, siendo la Virgen de los Dolores portada por primera vez por mujeres.

Multitud de fieles y devotos arroparon al cortejo durante todo su recorrido, a lo largo del cual se fueron rezando las estaciones del Vía-Crucis, hasta que pasadas las diez de la noche se llegara a la Capilla del Jesús, dando por finalizado este piadoso acto, uno de los principales de la presente Cuaresma.