sábado, 20 de septiembre de 2014

“Las cofradías no son asociaciones culturales ni peñas, sino que tienen que tener un compromiso social, religioso y una vivencia de la fe”.

El Rvdo. Padre Rafael Vez Palomino es un sacerdote de 48 años de edad natural de San Fernando, lugar en el que ha estado destinado estos últimos doce años como párroco de San José Artesano.

Desde principios de este mes de septiembre, sustituye al Rvdo. Juan Carlos Pérez al frente de la Parroquia de Santa Catalina de Alejandría, nombramiento que Monseñor Zornoza Boy realizó el pasado mes de mayo. Actualmente también ejerce como canónigo de la Santa Iglesia Catedral de Cádiz.

Vez Palomino nos abre las puertas de su despacho para conocer más a fondo al nuevo director espiritual de nuestras hermandades y cofradías.

A continuación reproducimos la entrevista con el nuevo párroco de Santa Catalina al que le agradecemos su amabilidad.

- ¿Quién es Rafael Vez y cómo le llega la vocación del sacerdocio?

Bueno, esa es una pregunta un poco complicada eh... Yo soy el menor de 5 hermanos y mellizo con el penúltimo. Soy un sacerdote gordo, por el peso, por el tamaño, y soy una persona que intento vivir con sencillez el Evangelio e intento vivir con radicalidad la opción que he tomado. Una persona alegre, risueña, con buen humor, de trato fácil, aunque pueda aparentar lo contrario muchas veces, pienso que trabajador, cosa que aprendí de mi padre, la responsabilidad en el trabajo y el esfuerzo, y amigo de mis amigos, daría la vida por ellos, tengo muy grandes amigos, igual que tengo muy grandes enemigos, pero bueno eso es parte también de nuestra vida.

Mi vocación al sacerdocio llegó prácticamente desde niño, siempre he tenido el deseo de ser sacerdote y las personas que me han rodeado me han ayudado a ir poco a poco perfilando esa vocación. En un primer momento yo quise ser religioso carmelita pero el sacerdote que me acompañó en mi etapa de discernimiento me hizo ver la necesidad de la Diócesis y entré en el Seminario Diocesano.

- ¿Cómo se tomó la noticia de su traslado a la Parroquia de Santa Catalina de Alejandría?

Pues primero no la esperaba, es decir, cuando fuí llamado al despacho del Obispo, este estuvo hablando de muchas cosas conmigo y en un momento de la entrevista me planteó el hecho de que, como había cumplido ya los doce años destinado en San Fernando, veía conveniente la necesidad de que prestara servicio aquí en Conil de la Frontera.

A mí me sorprendió muchísimo porque siempre ha sido un destino en el que he deseado ser párroco. En un momento determinado de mi historia se planteó la posibilidad de que viniera destinado de párroco aquí y bueno pues aquello no salío en aquel entonces y ahora me sorprendía muchísimo porque, primero era la ilusión de muchos años, conocía algunas cosas del pueblo de hace mucho, a muchos sacerdotes que aquí han estado, he sido muy buen amigo de muchos de ellos, y sigo siéndolo, y bueno pues realmente mi sorpresa fue que entendía que no comprendía que si Carlos había planteado salir y en el diálogo con el Obispo, él me planteó que si, de hecho yo ya después posteriormente hablé con Carlos y el Padre Carlos había planteado la posibilidad de un año sabático.

Entonces pues veía la dificultad porque trabajo en Puerto Real en un instituto, soy maestro de ceremonias de la Catedral de Cádiz, tengo un padre con 83 años y una hermana que vivía conmigo, y ellos también necesitan atención, y esta dificultad en la distancia también lo hacían. Pero bueno he venido con mucha ilusión y con muchas ganas, y sobre todo le dije al obispo al terminar la entrevista que estaba muy contento con el ofrecimiento que me hacía de ser párroco y la confianza que ponía en mí.

Es la primera vez que voy a ser párroco de pueblo, entendido como párroco de pueblo, de un solo pueblo. Mi primer destino fue Ceuta, en el barrio musulmán, pasé tres años allí, los mejores, yo creo que los inicios siempre son los mejores años de una vida del ministerio y van configurando un poquito lo que el día de mañana vas a ser.

Después estuve destinado en el Río San Pedro, que es una barriada de Puerto Real. Posteriormente pasé a San Benito de Puerto Real, donde estuve ocho años y los dos últimos años fuí arcipreste de la localidad. Después vine de casualidad a San Fernando en un momento en el que mi familia necesitaba que estuviera en San Fernando. Estuve doce años destinado en la Parroquia de San José Artesano, que han sido doce años maravillosos, me he venido con muy grandes amigos, con mucha pena, pero entendía que la parroquia estaba preparada para un cambio y que bueno pues también yo había cumplido ya una etapa de mi vida sacerdotal, y ahora se abre una etapa aquí, yo creo que gozosa y preciosa a la vez.

- ¿Cómo le ha acogido nuestra comunidad?¿Cuáles han sido sus primeras impresiones de Conil?

Me he sentido muy acogido, después... no paro de ir y venir a San Fernando por las circunstacias que hay, pero yo me siento muy acogido. La verdad que aquí hay muchas reuniones para todo, y yo he pedido desde el primer momento que me hablen con claridad, igual que a mí me gusta hablar con mucha claridad, es decir, lo que no me gusta lo digo, lo que me gusta lo manifiesto, y bueno realmente me siento cariñosamente acogido.

Me ha sorprendido, primero porque conozco bien el pueblo desde hace muchos años y bueno no esperaba menos, comprendo las circunstancias que estaba viviendo el pueblo ahora mismo en estos momentos de cambio y he intentado de alguna manera no hacer ruido con mi entrada, pero me siento muy acogido, cariñosamente acogido.

- ¿Qué consejos le ha dado su antecesor, el Padre Juan Carlos Pérez Jiménez?

Bueno hemos tenido poco tiempo para charlar porque él está terminando algunas cosas y ha querido que yo empiece a conocer los grupos sin él, diríamos, sin dejarme nada de antemano, para no dirigir de alguna manera mi pensamiento hacia una cosa u otra.

Pero bueno yo creo que Carlos me ha dicho dos cosas muy importantes, que la gente te quiere y que él se ha sentido muy querido y valorado, y que a mí me van a querer igual o más, y la segunda cosa es que es un pueblo bueno.

Yo no esperaba menos del pueblo de Conil, es el pueblo donde nació mi madre y bueno pues yo he tenido la madre que he tenido y considero que la gente de Conil es buena, trabajadora, muy acogedora, hospitalaria, generosa, que también es importante.

Yo estoy sorprendido realmente y es una sorpresa muy gratificante ver la cantidad de gente que hay, el trabajo que realizan, la responsabilidad que llevan muchos de ellos, y realmente yo estoy totalmente agradecido a Dios por lo que me he encontrado, a pesar de las dificultades que haya podido haber y que estos últimos tiempos alomejor han podido ser más difíciles para todos. Sin embargo, yo encuentro una comunidad muy hecha en muchas cosas y bueno, gente muy responsable también y gente con ganas e ilusionadas también por esta nueva etapa.

- ¿Cuáles serán sus líneas a seguir?

Bueno eso es difícil de saber ahora mismo porque, cuando uno viene nuevo, yo he intentado venir sin proyectos, he intentado, y quiero ahora mismo, conocer un poco la realidad de lo que me toca, de hecho lo que estoy haciendo cada día es reunirme con todos los grupos que hay en la parroquia.

Yo ahora mismo, como vivo en San Fernnado temporalmente, vengo sobre las cinco de la tarde, y desde las seis empiezan las reuniones de grupo. Entonces, lo que estoy intentando es conocer lo que se está haciendo, doy algunas indicaciones de alguna cosa que podríamos hacer, y bueno pues dialogo con el grupo correspondiente de estas cosas y vemos de cara a posibles reuniones futuras.

Lo que estoy configurando ahora mismo con todos es el calendario de actividades del año. Me gusta programar el año entero antes de empezar, para saber lo que tenemos. Me estoy sentando con los distintos repesentantes y también con las personas que son colaboradores más cercanos: con mi sacristán, Juan, que lo conozco desde hace muchos años, con Carlos, mi antecesor, con el que me he sentado algunas veces, cuando puedo y cuando él puede, porque realmente es complicado reunirnos, con Juan también, el vicario parroquial.... y bueno lo que intento de alguna manera es conocer ahora mismo a la gente, aprenderme los nombres, porque son mucha gente y es muy complicado porque, si todas se llaman Pepi o todas se llaman Juani, ahora tienes que saber distinguir cual es una y cual es otra (risas).

Pero bien, he estado también en el colegio religioso, y me he sentido también muy acogido, yo me siento muy agradecido por la labor que están realizando las religiosas en el pueblo y la labor que desarrollan no solamente en el colegio sino en las dos residencias, tanto la de ancianos como la de alzheimer.

El equipo Pastoral de la Salud hoy me ha sorprendido muchísimo, la cantidad de enfermos que se visitan, y es muy gratificante ver que la gente trabaja, que la gente colabora, participa, el equipo de Cáritas... y estoy conociendo también a las distintas hermandades.

Me reuní el otro día con las catequistas, sesenta y dos mujeres, y la verdad que aquello fue... yo estaba sorprendido y realmente vi que había una mano de obra en esta parroquia muy buena y muy interesante.

- Sabemos que es usted cofrade, ¿cómo suele ser su relación con las hermandades y cofradías?¿es hermano de alguna?

Soy cofrade de nacimiento porque pertenezco a la Hermandad de los Afligidos de San Fernando desde chico, mi padre fue hermano mayor y mi tío también hermano fundador y hermano mayor, y siempre ha habido una vinculación con la Hermandad de los Estudiantes.

Después mi vinculación con las hermandades en San Fernando ha sido buena en líneas generales, he tenido dificultades con alguna de ellas, en concreto con una de las hermandades que trabajaba en nuestra parroquia. He sido fundador, primer director espiritual, de la Hermandad del Resucitado, digamos la renovación o creación de esa hermandad en San Fernando.

Es bueno, es decir, yo creo que el mundo de las cofradías es bueno, quizás lo que pasa es que muchas veces lo que tenemos que tener claro es nuestra identidad de iglesia, no son asociaciones culturales ni peñas ni grupos que aprovechan las instalaciones de la iglesia para almacenar tiestos, sino que tienen que tener un compromiso social, un compromiso religioso y sobre todo una vivencia de la fe. Y bueno pues quizás muchas veces hay entra un poco en conflicto, en mi tarea de director espiritual y animador, que muchas veces es una tarea difícil porque tienes que luchar con muchas cosas. Pero bien, yo creo que ha sido positiva los años que he trabajado en San Fernando, han sido complicados en algunos aspectos, pero por otro lado me considero muy satisfecho de la labor que he realizado y de los amigos que tengo en el mundo cofrade.

- ¿Y su relación con los jóvenes?

Bien pues, yo no soy jóven, tengo cuarenta y ocho tacos, y bueno pues no me muevo con mucha agilidad, pero bueno he trabajado, he tenido un grupo de jóvenes maravilloso en la parroquia. Hemos tardado años en hacerlo, en forjarlo, pero yo creo que hemos sintonizado muy bien, ha habido mucha afinidad y sobre todo mucha sintonía, mucha complicidad entre nosotros y diríamos que el culmen de estos doce años fue que peregrinaron a Santiago de Compostela y bueno pues hice el esfuerzo de ir en coche para verlos, y realmente pase una jornada deliciosa con ellos y yo creo que ellos conmigo. Guardo muy buen recuerdo de estos jóvenes, los extraño porque me gustaría tenerlos cerca de colaboradores porque no hacía falta decir lo que uno quería para que ellos lo entendieran, y realmente pues yo creo que si, que lograré conectar con la gente de Conil.

Veo mucha juventud por las calles, estos días que estoy paseando, como nadie me conoce así tu sabes pues puedes pasear por las noches en algunos momentos que he estado un poquito más tarde o que he ido a ver a Carlos, al subir las calles y demás, pues veo a mucha juventud, yo creo que es una tarea por hacer aquí en la parroquia y bueno pues habrá que ir empezando a buscar a esa gente y a ofrecerle también el Evangelio de la buena noticia de Jesús.

- ¿Cómo ve el uso de las redes sociales y los diferentes medios de comunicación en el mundo actual? ¿le parece una buena manera de transmitir el Evangelio?

Yo soy un apasionado de las redes sociales y soy un apasionado de todo el mundo de internet, todo el mundo de la informática, mi vida no funcionaría ahora mismo sin un aparato de estas caracterísiticas, un iPad, un móvil, un ordenador...

Yo creo que ha ahorrado mucho trabajo, mucho esfuerzo, y sobre todo nos ha ayudado a conectar y a poder expresar muchas cosas en una especie de campo de batalla que es el mundo de la comunicación social. A mí me parece muy interesante Facebook, me parece muy interesante el Whatsapp, me permite comunicarme con muchísima gente, el Twitter me permite expresar lo que pienso en cada momento, y veo que hay gente que te sigue, que dialoga contigo en las cosas que manifiestas, y también te permite conocer muchos pensamientos, muchas ideas que están ahí.

Creo que es positivo, hoy por hoy, necesario para la Evangelización. A mi me parece que una página web, una página de Facebook, como vosotros tenéis, a mi me parece fundamental, hoy por hoy una parroquia que no entre en ese mundo es una parroquia que terminará ahogada.

Los medios de comunicación social y las redes sociales han posibilitado el poder informarnos de todo, de tener la información casi en cuestión de segundos... cuando hablas de guerras, conflictos y demás es que lo ves, lo estás viendo. Yo creo que es un mundo apasionante, un mundo peligroso también en algunos aspectos porque cuando nos damos cuenta de todo lo que hay en torno a lo que sería la pornografía y demás... pero es un mundo valioso y yo creo hoy por hoy si Jesús volviera  a nacer realmente, no solamente predicaría por los campos y lugares sino que se sentaría delante de un ordenador para escribir, seguro que sí.

A mi me ha permitido conocer la realidad del mundo de las hermandades y la realidad de Conil gracias a vuestra página (Pasión y Glorias de Conil), que ni siquiera la conocía, a través de unos amigos míos me pusieron en contacto con vuestra página y me posibilitaron el conocer un poco las hermandades, fotos de Conil, y de muchas situaciones y muchas cosas, y a mí me ha parecido muy interesante porque yo creo que hoy por hoy es, prácticamente, como el diario que leía mi padre sentado en el escalón de la puerta de casa, lo que era el Diario de Cádiz antiguo grandote, pues hoy una página de un ordenador te permite ver cualquier cosa en cuestion de segundos y yo creo que es muy positivo.

- Le vimos en la procesión de la Virgen de las Virtudes con el hábito de canónigo, ¿explíquenos la tarea de maestro de ceremonias en la Santa Iglesia Catedral?

Bueno mi labor como maestro de ceremonias es la de organizar las celebraciones episcopales y las celebraciones que corresponden al Cabildo Catedral. El obispo, cuando celebra, tiene un maestro de ceremonias que es el que lleva la celebración, una especie de coordinador de la celebración porque en esas celebraciones se ejercen distintos ministerios que son necesarios coordinar, esa es mi tarea como miembro del Cabildo Catedral.

Esa es la tarea que yo ejerzo en determinados momentos del año cuando el obispo requiere la presencia del maestro de ceremonias en la Catedral, en determinadas fiestas litúrgicas en las que el Obispo asiste expresamente a la Catedral, y después el Cabildo también tiene otras fiestas correspondientes a los Santos Patronos, al día de los difuntos, el día de Todos los Santos, distintas fiestas de la Navidad, los oficios de Semana Santa... incluso todos los sábados por la mañana nos reunimos el Cabildo Catedral para rezar por la diócesis porque esa es la tarea que tenemos encomendada.

La labor sencillamente es la coordinación de las celebraciones episcopales y todos los ministerios que rodean a esa celebración. Por eso, la vestimenta que llevo y que utilizo es la de canónigo y el borlón característico es de color verde, en lo que sería el gorro del sacerdote que es un bonete, el color verde es el que caracteriza al canónigo.

- ¿Cómo ve al Obispo Rafael Zornoza Boy y a la Diócesis de Cádiz y Ceuta en general? ¿Y al Papa Francisco?

Yo al obispo lo veo como lo que es, el pastor, y bueno yo creo que está todavía, diríamos, abriendo caminos, no sin dificultad. Dificultad por ambos lados, yo creo que muchas veces no es tanto lo que quiere decir sino como se dice, como se hacen las cosas, entonces yo creo que en el mundo del diálogo de las personas, es necesario también ese mejorar las formas.

Yo creo que es un hombre interesante, un hombre ilusionado con lo que lleva entremanos, me parece que le ha tocado una Diócesis no creo que complicada, sino todo lo contrario, yo creo que la Diócesis de Cádiz es una diócesis generosa, es una diócesis que reaccionará positivamente, es una diócesis que necesita ser querida por su gente, valorada, respetada y yo creo que bueno, poco a poco, igual que él se está haciendo como obispo, nosotros nos estamos haciendo a su forma de ser pastor. Yo creo que requiere tiempo, no es fácil aterrizar en una diócesis e inmediatamente enganchar o encajar con la gente, pero creo que él no deja de hacer ese esfuerzo, y yo creo que nosotros también, a la largo del tiempo creo que habrá una reciprocidad y, sobre todo, creo que habrá una sintonía mucho más adecuada de la que hasta ahora ha podido haber, pero esto requiere paciencia por parte de todos.

En cuanto al Papa Francisco, yo soy un ilusionado del Papa Paco, yo le he llamado cariñosamente Papa Paco, así se lo transmitía a mis fieles y a los niños de la parroquia, tenemos que querer a Papa Paco. ¿Por qué? porque me parece un hombre que ha traído un aire muy de novedad al mundo del Evangelio y sobre todo a la figura del Papado.

Yo creo que el Papa Benedicto XVI era realmente un lumbrera en el mundo de la teología, pero le faltaba ese enganche, ese sintonizar al verlo. Yo creo que el Papa Paco nos ha ayudado a quererle simplemente viéndolo, ese rostro, esos mofletes, esa expresión siempre de sonrisa, de vitalidad, en una persona ya bastante mayor y que bueno realmente habla con una claridad y con una sencillez que yo creo que hace falta. A mí me parece que no hacen falta grandes discursos teológicos en el mundo del Evangelio, sino que hace falta sencilla y llanamente gestos, gestos que traducen una vida.

Yo creo que bueno pues ver al Papa llamar por teléfono a las madres de gente que ha sido asesinada o que han perdido a un hijo trágicamente y demás, a mi me conmueve, porque realmente me hace ver qe no es un hombre que viva entre palacios, sino que está acostumbrado a vivir con la gente de la calle, y yo creo que eso es valioso. Para la iglesia ha sido un huracán, yo creo que sí, estoy convencido, y nos va ayudar a cambiar, nos hace falta cambiar a todos, a los sacerdotes, a los obispos, a los cardenales, a todos nos hace falta este cambio que ha traído este Papa venido del fin del mundo.

- ¿Qué le diría a los conileños?

Que me siento muy agradecido por estar aquí y que me siento muy feliz, muy gozoso y sobretodo yo le diría también a los conileños que las puertas del despacho estarán abiertas siempre a todos, que quiero conocerlos, quiero servirlos y quiero transmitirles la alegría y el entusiasmo del Evangelio, ni más ni menos. Compartir con ellos la fe y aprender de ellos en el camino de la vida.

- Por último, agradecerle la disposición a realizar esta entrevista para nuestro portal web, sobre todo teniendo en cuenta que sólo han pasado unas semanas de su llegada a Conil, muchas gracias.

Gracias a vosotros.