El cardenal jesuita, de 76 años, sucederá a Benedicto XVI al frente de la Iglesia Católica. Se ha presentado ante los fieles pidiendo que pidan a Dios que le bendiga en su nuevo camino, que debe ser de amor y hermandad.
Los 115 cardenales electores designaron en la Capilla Sixtina del Vaticano al cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio, de 76 años, como nuevo Papa y sucesor de Benedicto XVI, tras cinco votaciones y dos jornadas de cónclave para elegir al 266º sucesor de Pedro. Bastaron poco más de 25 horas para que los purpurados, encerrados en la Sixtina, eligieran al nuevo sumo pontífice, que llevará el nombre de Francisco I, tras la renuncia de Benedicto XVI.
El nuevo papa se presentó a los fieles pidiendo que pidan a Dios que le bendiga en su nuevo camino, que debe ser de amor y hermandad.
El más largo de la historia fue el cónclave en el que fue elegido el papa Gregorio X, que se prolongó durante 33 meses, desde el 29 de noviembre de 1268 hasta el 1 de septiembre de 1271, y el más corto el de la elección de Julio II en 1503, de apenas unas horas. En la Plaza de San Pedro se ha acogido la aparición de la fumata blanca a las 19:06 bajo un mar de paraguas y una intensa lluvia. La elección se ha producido tras dos fumatas negras, una este martes a las 19:41 y otra, en la mañana de este miércoles a las 11:38. Como anécdotas de la tarde, la gaviota que se ha posado durante media hora sobre la chimenea, acaparando todas las miradas, y la reactivación de la cuenta de Twitter del Papa.
El primer papa jesuita
El arzobispo de Buenos Aires, Jorge Mario Bergoglio, se convierte en el primer jesuita de la historia en ocupar este puesto. Bergoglio fue creado cardenal por Juan Pablo II en el consistorio del 21 de febrero de 2001, con el título de San Roberto Belarmino. Nacido en Buenos Aires pero con raíces italianas, estudió y se graduó como ingeniero químico, pero después eligió el sacerdocio y entró en el seminario de Villa Devoto. El 11 de marzo de 1958 se unió al noviciado de la Compañía de Jesús y posteriormente estudió humanidades en Chile.
En 1963, regresó a Buenos Aires y cuenta con una licenciatura en filosofía en la Facultad de Filosofía de la máxima colegio San José San Miguel. Entre 1964 y 1965, fue profesor de literatura y psicología en el Colegio de la Inmaculada Concepción de Santa Fe en 1966 y ha impartido estos temas en el colegio del Salvador de Buenos Aires. De 1967 a 1970 estudió teología en la Facultad de Teología de la máxima colegio San José, en San Miguel, donde se graduó. En 1969 fue ordenado sacerdote. También ha sido maestro de novicios en Villa Barilari, de San Miguel (1972-1973), profesor de la Facultad de Teología y Consultor de la Provincia y Rector del Colegio Arriba.
En la década de los 80 viajó a Alemania para completar su tesis doctoral y posteriormente se trasladó a la iglesia de la Compañía en la ciudad de Córdoba como director espiritual y confesor. El 20 de mayo de 1992, Juan Pablo II lo nombró Obispo titular de Auca y auxiliar de Buenos Aires. El 27 de junio del mismo año recibió de la Catedral de Buenos Aires la ordenación episcopal del cardenal Antonio Quarracino, el Nuncio Apostólico, Monseñor Ubaldo Calabresi y el obispo de Mercedes-Luján, monseñor Emilio Ogñénovich.
El 3 de junio de 1997 fue nombrado Arzobispo Coadjutor de Buenos Aires y, a la muerte del cardenal Quarracino, el 28 de febrero de 1998 fue nombrado arzobispo de Buenos Aires. Desde noviembre 2005 hasta noviembre 2011 fue presidente de la Conferencia Episcopal Argentina. Es miembro de las congregaciones para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, para el Clero, para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica; del Pontificio Consejo para la Familia: de la Pontificia Comisión para América Latina. También es autor de los libros Meditaciones para religiosos de 1982, Reflexiones sobre la vida apostólica en 1986 yReflexiones de esperanza, de 1992, según señala el Vaticano.
Qué pasa cuando es elegido un nuevo Papa
Cuando un cardenal obtiene la mayoría necesaria de dos tercios de los votos para ser elegido papa, el cardenal diácono más joven llamará para que entren en la Capilla Sixtina al secretario del Colegio Cardenalicio y al maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias. Al candidato elegido se le pregunta en latín: "Acceptasne electionem de te canonice factam in Summum Pontificem?" (¿Acepta su elección canónica como Sumo Pontífice?) Si responde "accepto"(acepto), tal como se espera de él, entonces se le preguntará: "Quo nomine vis vocari?" (¿Qué nombre escogerá como papa?).
Las papeletas que sirvieron para la votación se queman en una de las dos estufas instaladas en la Capilla Sixtina, mientras la otra se usa para la fumata blanca, el humo blanco que anuncia la elección papal. El 266º sucesor de San Pedro, el nuevo líder de la Iglesia Católica, vestirá por primera vez la indumentaria papal, que ya ha sido confeccionada en tres tallas por la sastrería Gammarelli en Roma. Estos preparativos tienen lugar en el Salón de las Lágrimas, junto a la Capilla Sixtina. Tras aceptar, el pontífice se convierte en Obispo de Roma y en jefe del Colegio de Obispos y asume el poder pleno de la iglesia. La larga lista de títulos papales incluye vicario de Cristo, sucesor de San Pedro, príncipe de los Apóstoles, Pastor Supremo de la Iglesia Universal, Patriarca de Occidente, Primado de Italia, Arzobispo y Metropolitano de la Provincia de Roma y Soberano del Estado Vaticano.
Tras la fumata blanca y el repique de campanas en la Basílica de San Pedro pueden transcurrir entre 30 minutos y una hora hasta que nuevo Papa haga su aparición en el balcón central de la basílica. El cardenal protodiácono Jean-Louis Tauran será el primero que anuncie a los devotos, curiosos y prensa concentrados en la plaza de San Pedro que ha sido elegido un nuevo Papa. La fórmula tradicional es: "Nuntio Vobis Gaudium Magnum, Habemus Papam" (Les anuncio con gran alegría. Tenemos un nuevo papa), seguido del nombre del nuevo pontífice.
Fuente: Diario de Cádiz.
Fuente: Diario de Cádiz.
