«En las parroquias y pueblos de Cádiz residen más de 50.000 extranjeros. Están presentes en nuestras localidades, viven ya entre nosotros. Debemos salir a su encuentro y acogerles». Con estas palabras, incluidas en la Carta que el obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza, ha dirigido a sus fieles de la provincia con motivo de la Jornada Mundial de las Migraciones que se celebró ayer, la Diócesis gaditana abría los brazos a inmigrantes y foráneos.
Bajo el lema 'Salgamos al encuentro... abramos puertas', casi un millar de personas se dieron cita ayer en Conil. La cita merecía tal despliegue; a las 11 de la mañana, la Parroquia de Santa Catalina acogía la solemne Misa con daba comienzos los actos programados.
El obispo gaditano presidía la eucaristía de esta VI Fiesta de Todos los Pueblos, acompañado de otros sacerdotes de la zona. Zornoza habló en su homilía de la «nueva situación» que se vive en numerosos pueblos y ciudades de Cádiz, donde la comunidad extranjera ha ido creciendo en los últimos años de forma espectacular.
Para coordinar las acciones de fe con las humanitarias, el máximo representante de la Iglesia en Cádiz recordó que los inmigrantes «son personas con el derecho de salir en busca de mejores condiciones de vida». Especialmente emotivo fue el recuerdo de quienes fallecen en el intento de buscar una vida mejor, con el Padre Patera presente en la iglesia.
Los actos lúdicos pusieron el broche de oro, con la música y el baile de grupos de Bolivia, África o Vejer, que actuaron en el salón de actos de la parroquia.
Fuente: La Voz Digital
