La emperatriz de los jóvenes se reencuentra con su pueblo en una jornada brillante en la que por fin no hubo que mirar al cielo.
La imagen de Santa Catalina, a los sones del Himno Nacional, con el olor a incienso llenando el ambiente, salía por la puerta del templo pasadas las cuatro y media de la tarde, entre cálidos aplausos.
Una procesión que siguió su discurrir por las principales calles del núcleo urbano hasta llegar a la Plaza de Santa Catalina, seguir posteriormente por Calle Cádiz para regresar a su parroquia a través de Extramuros.
El cortejo estuvo formado por: Cruz de guía, guión corporativo de la corporación, representaciones de las distintas hermandades y cofradías, libro de reglas, presidencia y tras esto el paso procesional.
Entre los estrenos que presentó la asociación parroquial destacan la cruz de guía que abría el cortejo, querubines para el paso procesional, así como la peana sobre la que iba colocada la santa. Destacar de igual modo el estreno del libro de reglas de la corporación, y un rosario de plata, dondado por el presidente de la Asociación: Daniel Trujillo.
Una procesión que tiene que irse afianzando en el mes de noviembre poco a poco a lo largo de los próximos años y que al filo de las ocho de la tarde volvía a su templo para completar y finalizar de este manera el particular período de glorias de nuestra localidad.
La santa estuvo acompañda en su recorrido por los acordes de la Asociación Filarmónica "Ciudad de Conil" que demostró su buen hacer. Gran labor la de la jóven cuadrilla de la Agrupación de Cargadores al frente de José Manuel Ramírez, la cual fue la encargada de portar el paso de la titular.
Con la finalización de los cultos en honor a Santa Catalina de Alejandría, llega diciembre y con el la espera del nacimiento de nuestro señor.
